Sobre cómo la comunicación interna contribuye a crear un ambiente de colaboración. Proponemos 7 ideas para implantar con acierto una herramienta colaborativa.
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El error de un Director General
Ricardo es el Director General de una cadena de hoteles quien puede presumir de tener mucha actividad y seguidores en las redes sociales externas.
A Ricardo le entusiasma seguir las tendencias del entorno y después de asistir a unas jornadas sobre Digitalización y colaboración en la empresa, quedó tan convencido de las aportaciones de un blog que quiso sorprender a su gente, de modo tomó él mismo, la decisión de contratar por iniciativa propia, a una empresa especializada en blogs que ya conocía.
Firmado el contrato con la mejor intención, anunció a todo el personal del hotel vía correo electrónico que la empresa ya tenía un blog corporativo interno.
Jamás se le ocurrió pensar que una iniciativa tan positiva iba a tener resistencia.
A las pocas horas del anuncio empezaron a circular rumores. Se decía:
“Es una forma de presionar al personal para que opine y trabaje más”
“¡Quieren ideas; que piensen ellos!”
“El que no participe va a ser fichado por RRHH y será despido”
“Un gasto inútil; no servirá para nada”
Algunos trabajadores se quejaron ante el comité de empresa y el sindicato; el Director General indignado pensó retirar su iniciativa, no sin antes escuchar las reflexiones de un amigo consultor.
Según el experto, antes de lanzar una propuesta de esa magnitud, conviene sondear a través de una encuesta, el posible impacto ante sus audiencias.
Comunicación interna y cultura colaborativa: ¿Cómo implantarla?
Desde Talentos Reunidos, le proponemos 7 propuestas antes de implantar una herramienta colaborativa.
7 ideas para implantar una herramienta colaborativa
Propuesta #1 Realizar un proyecto de la nueva herramienta colaborativa
El proyecto debe tener en su etapa primera, un apartado de sondeo, para prever el impacto de la herramienta colaborativa.
Después, con los datos analizados y si procede se diseña un proyecto en cual se explican todos los detalles: objetivos, personal implicado, fases de implantación, calendario editorial, redes sociales que se habilitarán, canales de comunicación, campaña de comunicación, seguimiento y evaluación.
En el proyecto hay que anexar un manual de uso o un protocolo para su uso o una netiqueta
Una netiqueta o etiqueta net, se utiliza para referirse al conjunto de normas de comportamiento general en Internet. La netiqueta no es más que una adaptación de las reglas de etiqueta del mundo real al virtual.
Además, conviene valorar los siguientes antecedentes: estudios de clima laboral, cultura participativa, oportunidad de su lanzamiento, clima laboral actual.
Propuesta #2: Buscar el apoyo e implicación de directores, mandos y jefes
Antes de invitar al personal a participar convendría valorar, si mandos y jefes aplican la psicología positiva y la inteligencia emocional en su estilo de liderazgo. Recordemos que son los mandos y directores un referente, tanto para crear un ambiente colaborativo como para eliminar las barreras que impidan las aportaciones individuales y colectivas.
Estos líderes deben conocer muy bien la nueva herramienta colaborativa y deben estar convencidos de su utilidad.
Incluso conviene contar con la implicación del Director General.
Propuesta #3: Estar decididos a crear una comunidad colaborativa activa
La comunidad de colaboradores debe comenzar con una red de corresponsales a quienes hay que entusiasmar en la herramienta colaborativa. Si se crea una comunidad de colaboradores se podrá conocer mejor sus opiniones , expectativas, puntos de vista, pero antes hay que sensibilizar en el tema a través de una campaña informativa dirigida por el área de comunicación interna.
Se trata de fomentar entre el personal el gusto por conversar sobre temas que son de interés, de comunicarse unos con otros y compartir ideas, aportes, valoraciones…
Propuesta #4: Formar al personal sobre el tema
El proceso formativo se puede dar utilizando diferentes recursos como por ejemplo: a través de conversaciones de los jefes con los colaboradores, presentaciones en grupo, debates sobre la realidad digital, del mercado y de la competencia. También, se puede organizar un curso de corta duración 8 o bien, de 20 horas, con unos contenidos útiles, concretos y adecuados a la realidad del negocio.
Propuesta #5: Recordar el proyecto empresarial
La condición clave para que se consolide el compromiso laboral es que el personal entienda y se sienta parte del proyecto empresarial, que entienda los valores, los cuales no solo deben servir para “parecer buena empresa”, sino que los valores deben vivirse en la rutina laboral.
Recordar el proyecto empresarial crea un norte, moviliza al personal hacia la visión que se quiere lograr.
Se trata de que todo el personal entienda el negocio: la misión: ¿a qué nos dedicamos?, visión: ¿hacia dónde vamos? y sobre todo, que conozca el por qué de los valores corporativos.
Si hacemos más comprensible el proyecto empresarial entre el personal, fortalecemos la cultura corporativa.
Propuesta #6: El protagonista de la campaña debe ser el colaborador
En la campaña para promocionar la herramienta colaborativa el empleado debe ser el protagonista. Con este fin se utilizan todos los recursos que estén a nuestro alcance: apelación a la comunicación emocional, storytelling, vídeos, canales digitales, entre otros.
El objetivo debe movilizar e impactar de modo que los colaboradores se sientan importantes y parte de la campaña de comunicación.
Propuesta #7: Seguimiento y evaluación permanente
Implantada la herramienta colaborativa el siguiente paso es el seguimiento. Hay que concretar las medidas que se tomarán para la evaluación permanente del plan de acción.
Será también necesario asesorar de forma permanente al personal de apoyo en todo el proceso de comunicación con el fin de medir la calidad y efectividad del trabajo a través de correcciones oportunas y necesarias.