En este post hablo sobre el entrenamiento que conviene dar a los empleados en la gestión de una crisis. Destaco los aportes de la formación a la gestión de crisis y la importancia de este tipo de formación para todas las empresas , especialmente para las empresas que por su actividad, son más vulnerables a las crisis. Los programas de formación aconsejables para afrontar mejor una crisis son: los simulacros y la formación de los portavoces de la empresa.
APORTES DE LA FORMACIÓN EN LA GESTIÓN DE CRISIS
La formación aplicada a la gestión de una crisis, aporta a todo el personal, sobre todo tranquilidad y sentido común.La formación, no es experiencia sino una forma de adquirir conocimiento y una buena manera de preparar al personal para afrontar situaciones difíciles.
LAS EMPRESAS MÁS VULNERABLES
La realización de simulacros y el adiestramiento de portavoces ante una crisis son una práctica cada vez más habitual en las empresas, especialmente para aquellas que por su actividad están más expuestas a peligros y riesgos. Por lo general, en este tipo de empresas se prepara a todo el personal para responder de la mejor forman ante “una situación inesperada y difícil”.
LOS SIMULACROS: ENTRENAMIENTO DE LOS EMPLEADOS
Antes de todo, ¿qué es un simulacro? Como dice la guía práctica para la realización de simulacros, un simulacro es “un ensayo acerca de cómo se debe actuar en caso de una emergencia, siguiendo un plan previamente establecido basado en procedimientos de seguridad y protección”.
La formación a través de simulacros es muy valiosa en tanto que permite: valorar la confianza y cooperación con que actúa el personal, poner a prueba la capacidad de respuesta del personal de la empresa y dar conocimiento acerca de cómo actuar en caso de emergencia.
En este tipo de programa de formación, el formador entrena al personal en una situación complicada para que aprenda a dominar sus nervios. En los simulacros, se eligen y diseñan los distintos escenarios en los que puede encontrarse el personal : incendio, atracos,residuos y materiales peligrosos,etc.
El formador elegirá el escenario dependiendo de los riesgos a los que esta expuesta la empresa.
Los simulacros, permitirán a los empleados aprender cómo hay que reaccionar y comprobar como funciona la seguridad .
LA FORMACIÓN DE PORTAVOCES
Este programa de formación tiene por finalidad dar conocimiento acerca de: cómo funcionan los medios de comunicación social , que es una crisis y en qué consiste un plan de crisis y cómo administrar una crisis para ser portavoces eficientes. ¿A quién se entrena? a las personas que por su trabajo tengan que enfrentarse a medios de comunicación con el objetivo de formar portavoces eficaces: hábiles, con capacidad de respuesta, rápidos y prudentes y resolutivos en la gestión de la crisis.
MEJOR TENER UN SOLO PORTAVOZ
El buen portavoz no se improvisa, ni se le entrena en el momento de presentarse la crisis. No solo es suficiente elegir a una persona con buena imagen y que hable bien, es muy importante que tenga credibilidad y haya recibido formación o reciclaje en el trato con los medios.
Lo ideal -dicen los expertos- es que haya un solo portavoz para evitar contradicciones y sobre todo para abordar la crisis con un mensaje único, con una sola voz. Sin embargo, puede darse el caso, que la empresa tenga y requiera de varios portavoces. En este caso, debe existir total coordinación entre los mensajes.
ENTRENAR AL PORTAVOZ
Esta formación sirve para practicar poniéndose el portavoz en las situaciones más delicadas y complicadas y en los peores escenarios. Se hacen ensayos de cómo y qué responder a los medios en caso de una crisis. Se piensa en una batería de preguntas que pueden hacer los periodistas, se analizan las preguntas y respuestas que debería dar la empresa.
Generalmente, todas las ideas, respecto a las preguntas, se someten a debate y se busca un consenso para elaborar argumentos y procedimientos.Finalmente, toda esta información se recoge y se registra en el manual de crisis de la empresa.
Lamentablemente, la formación de portavoces, en la práctica, es bastante escasa en las empresas, sin embargo, es muy indispensable . No podemos dejar de valorar que los portavoces son los encargados de cuidar de la credibilidad y reputación de su compañía, especialmente en situaciones de crisis.
Aunque son muchas las empresas que prefieren poner a debate entre todo el personal, qué decir en una crisis.Se dan otros casos que simplemente se forma al portavoz o a los portavoces, con la teoría recogida en el manual de crisis.
En el próximo post hablaremos sobre el Manual de crisis.