En este post expongo la idea de que los cambios producidos en el entorno macroeconómico y microeconómico que rodea a las empresas, demandan la adaptación al entorno. Sostengo que todas las empresas deben asumir un lento y progresivo cambio y que la mejor forma de afrontar esta responsabilidad es con un plan de comunicación interna y de formación.
Todas las empresas grandes y pymes se ven afectadas por la globalización de los mercados y por un entorno cambiante y cada vez más incierto. En éste actúan, venden, cobran lo que han vendido, compran, obtienen financiación, se abastecen y contratan personal. Si en el entorno predomina la crisis, las empresas también se ven envueltas y afectadas por esta situación.
Si los cambios que se producen en el entorno de su empresa superan en importancia y cantidad a los que se producen en su interior, su empresa está condenada al fracaso a medio o a largo plazo. Simón Majaro
Índice
Gestionar el cambio es la opción
Ciertamente, si el entorno cambia y la empresa no lo hace interiormente se produce un desajuste entorno-empresa
Sabemos que muchas por no decir casi todas las empresas se encuentran en procesos de cambio, un cambio que en muchos casos está motivado por una cuestión de supervivencia. Gestionar el cambio y liderarlo es la única alternativa.
Los empresarios que no reconocen la necesidad de cambio y no adaptan sus estructuras a la nueva realidad global, se distancian de su mercado y entonces, pueden desaparecer. Así, por ejemplo, deben estar atentos a la posible aparición de nuevos productos, adaptarse a los nuevos enfoques publicitarios que demanda la sociedad, utilizar las redes sociales y la tecnología multimedia, buscar nuevos mercados, identificar y conocer mejor a su público objetivo, modernizar procesos y una larga lista de retos que conviene asimilarlos como una oportunidad para mejorar.
Tres pasos para conseguirlo: la comunicación interna la herramienta
Félix Cuesta en su obra “La empresa virtual”(1998) propone tres pasos para afrontar el compromiso permanente con el cambio.
El primero se refiere a realizar un seguimiento de los agentes que lo provocan, el segundo a la planificación y el último a la comunicación interna.
El primer paso: la tecnología, los gobiernos, los cambios sociales, los competidores, los clientes, los nuevos mercados, las fluctuaciones económicas, los cambios en recursos humanos /…/ Superado el análisis sugiere, como segundo paso, la responsabilidad de planificar y, por último iniciar un proceso de comunicación en toda la empresa. Reconoce que la comunicación interna es herramienta de gestión más adecuada para integrar al personal en el proyecto común.”